Argentina, en ese entonces último Campeón del mundo, tuvo una traspié sorpresivo en el partido inaugural ante Camerún (quien finalizaría primero en el Grupo) cayendo por un gol.

Luego logró recuperarse contra URSS ganandole 2-0 con goles de Troglio y Burruchaga y en el tercer partido de la fase clasificatoria igualó 1-1, gol argentino marcado por Pedro Monzón frente a Rumania quién ocuparía el 2º puesto del Grupo B.

Argentina, habiendo terminado 3ra le correspondería enfrentarse en octavos de final con el 1º del Grupo "C", nada mas ni nada menos que Brasil.

El 24 de Junio del '90, Argentina chocaba contra la otra potencia sudamericana en el Estadio Delle Alpi en Turín. Minuto 80 contragolpe de Argentina en piernas de Maradona, pase fenomenal a Cannigia quien logra escapar de su marcador, eludir a Tafarel y a solo 10 minutos del final convertir el gol que le permitiría a la Celeste y Blanca dejar atrás un durísimo rival rumbo al objetivo final, seguir siendo el Rey del mundo futbolístico .

Ahora en cuartos vendría la dura Yugoslavia, partido que tras empatar 0-0 se definió por penales 3-2 a favor de Argentina. Convirtieron para la celeste y blanca Serrizuela , Burruchaga y Dezzotti, mientras que el arquero Ivkovic le atajó el tiro a Maradona.

Tras la hazaña de Goycochea atajando dos penales contra los yogoslavos, la parada en semis era contra el local, Italia. El partido finalizó 1-1 nuevamente Cannigia haciéndose presente en el marcador y Schillaci para los locales.
Luego en definición por penales, "el vasco" la jugaría de héroe otra vez al detener los remates de Donadoni y Serena finalizando la serie 4-3 a favor de los dirigidos por Bilardo y con el ticket a la final en el bolsillo, dejando afuera del premio mayor a los dueños de casa, pero sin poder contar por acumulación de amarillas con su rubio pelilargo goleador para la final contra la República Federal de Alemania .

Y llegó el 8 de Julio de 1990, en el estadio Olimpico de Roma ante más de 73.000 espectadores se enfrentaban la Alemania de Matthaeus, Brehme, Klinsmann contra la Argentina de Maradona, Burruchaga y Goycochea. Un partido que tenía destino de alargue y eventual definición por penales donde los argentinos apostabamos al gigante de Goycochea, pero no.
A 5 minutos del final el árbitro mexicano Edgardo Codesal, quien ya había expulsado a Pedro Monzón cobraba penal para los europeos porque "había interpretado" que Roberto Sensini le había cometido falta a Rudi Voeller. El resto es historia conocida, penal muy bien ejecutado al rincón derecho por Andreas Brehme ponía sentencia final al partido donde Alemania se consagraría por tercera vez en su historia como Campeón Mundial.